Las figuras de niños y niñas es uno de los temas predilectos de Raúl, durante las décadas del 40 y 50. Utilizaba como modelo a sus hijos y vecinos, como “Catalina”, la hija de una vecina de la calle 3 de Febrero, en el barrio de Núñez, donde vivían antes de mudarse a la vuelta, a la calle Pico.

Hijo de inmigrantes italianos, Raúl Soldi nació en Buenos Aires, el 27 de marzo de 1905. A los quince años de edad comenzó a dibujar y pintar. Unos años más tarde, en Venecia, ante los maravillosos murales de su basílica y los tesoros de sus museos, que Soldi decidió que su vocación era la pintura.

El 25 de mayo de 1966, quedó inaugurada la cúpula del Teatro Colón, maravillosa obra pintada por Soldi. Realizó también pinturas murales para la galería Santa Fe en Buenos Aires (1953) y una capilla de la Basílica de la Anunciación (1968), en Nazareth dedicada a la Virgen de Luján, patrona de nuestro país.

Designado Ciudadano Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires, recibió en 1992 el gran homenaje en las Salas Nacionales de Cultura (Palais de Glace) con una exposición integrada por 243 obras, entre óleos, pasteles y grabados, que abarcaban su fecunda trayectoria artística y más de 400.000 visitantes le manifestaron su amor al maestro.
El 21 de abril de 1994 falleció en Buenos Aires, a los 89 años de edad.